Nuestro rechazo asimismo a aquellos que haciéndose pasar por periodistas mercadean con la verdad vendiendo su pluma y su conciencia; de ellos nos avergonzamos. ¡Malditos sean!
Hoy que existen tantos canallas enganchados a periodistas se hace imperativo batallar en contra de sus pretensiones dañinas y peligrosas. No a estos farsantes y a los que quieren acallar la verdad. Sí a los que defienden el derecho a la opinión ajena con integridad.
¡QUE NUNCA MUERA LA LIBERTAD DE PRENSA!
!Que nunca Muera la libertad de prensa!,pero que mueran Los malditos peseteros Dominicanos que venden su alma al mismo diablo,a un Leonel cualquiera .!malditos Sean !
ResponderBorrar!Que nunca Muera la libertad de prensa! ! Muerte a Los peseteros Dominicanos que venden su alma al mismo diablo! ,Malditos Sean ,ESA gavilla de farsantes asalariados de Leonel. Evelio Martinez
ResponderBorrarFelicidades a todos los auténticos periodistas. En especial a los que todavía no se han envilecido y ejercen dignamente su oficio.
ResponderBorrarRafael Darío Herrera
La digna labor del verdadero periodista concita una serie de atribuciones indispensables para su excepcional desempeño en el fluido diario vivir.
ResponderBorrarSobretodo, debe ser sumamente entregado a sus responsabilidades inherentes, el ser estoicamente insobornable, empátíco y enérgico, cargado de mucho entusiasmo, fiel a los principios de la comunicación imparcial, constantemente actualizado, instruido y oportuno, con presencia y alta credibilidad, de extraordinario espíritu investigativo, disponer de gran arrojo y extrema valentía, honesto, responsable y respetuoso, entre otros elementos significativos que identifican al comunicador eficiente.
Felicito de todo corazón, en el Día del Periodismo, a quienes ejercen honrosa y dignamente este noble y apostolado oficio del periodismo auténtico. Asimismo, a los que tenemos la osadía de escribir algunas cuartillas, también, a mi humilde entender y sin inmodestia alguna, nos toca una partecita de esas festivas congratulaciones; participemos animosos de todo el despliegue esplendoroso de esas genuinas pretensiones.
Reiterándoles el mejor de los aprecios y consideraciones,... de ustedes,...Cuqui Rodríguez Martínez.
En mi caso, anhelo la época en que los periodistas siempre estaban a la defensa de los mejores intereses para el país; la época en que sabían poner a un lado su filiación política y en otro, su profesión; el país se ha quedado sin defensores, porque la mayoría está en búsqueda y la nación no les importa.........yo quiero felicitar a la excepción que todavía ejerce su oficio con apego a su conciencia.......a los otros hay que despreciarlos y recordarlos como pobres diablos, cuya codicia los hizo olvidar su sacerdocio.
ResponderBorrarRolando Espinal