DE INTERÉS GENERAL
Por Gonell Franco
Editorial de El Masacre.com
La delincuencia, en todas sus manifestaciones, incluyendo la violencia, ha crecido de forma agigantada en la República Dominicana, al extremo que pareciera que el control se le ha ido de las manos a las autoridades.
Es una situación sumamente preocupante para la parte sana de la sociedad, y que, gracias a Dios, todavía podemos decir que es la mayoría.
Son varios los factores que generan la delincuencia, comenzando por el seno familiar y el fuego que por diversos medios envía la misma sociedad, la que está bastante mercantilizada y que a mucha gente no le gusta lo poco y ganarlo con el sudor digno de su frente.
Pero, lo más grave aún es que dentro de la propia Policía hay delincuentes y criminales, y así lo demuestran hechos acontecidos en las últimas semanas y que llenan a la población de rabia, indignación e impotencia.
La Jefatura de la uniformada trata de justificar que algunos acontecimientos de corte criminal por parte de agentes de la institución no son una línea de la institución, pero la verdad es que al momento de cometer la acción actúan en nombre y representación de ella.
Hace muchísimos años (desde que Cuca bailaba), que escuchamos hablar de la llamada profilaxis en la Policía, pero como entienden algunos ilustres ciudadanos de nuestro país, al parecer, que todas las piezas están podridas (no solo careadas), y habrá que inventarse una caja de dientes, o plancha, como se le conoce en nuestra zona, de las que fabricaba el difunto Lica en La Ceiba de Loma de Cabrera.
Otra inconveniente, podría ser que los Odontólogos o mecánicos dentales que han pasado por la Policía no sean muy buenos, y por eso sigue la hemorragia en la sociedad dominicana.
La situación ha sido tan alarmante, que desde el propio gobierno se ha hecho un llamado a la Policía para que detenga esa criminalidad, de la que también es parte.
Estamos conscientes que hay que combatir la delincuencia, pero no es matando a personas inocentes.
Es que la policía cumpla su rol profesionalmente, en base la constitución, las leyes, la institucionalidad y la profesionalidad, y que la justicia drásticamente cumpla con lo establecido por la jurisprudencia y nuestro marco jurídico.
Es claro, además, que la familia, la escuela y la sociedad en su conjunto, también tienen que cumplir su rol.-
domingo, 18 de julio de 2010
La criminalidad policial
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Muy buen trabajo.
ResponderBorrarMonchy mateo.