viernes, 11 de febrero de 2011

PELAGIO GIL, UN GRAN SER HUMANO

Por Ángel Berto Almonte

Desde que tengo uso de razón, conozco al señor Pelagio Gil, electricista de oficio (ya retirado). Cuando visito mi pueblo me reúno con él, porque tiene un sentido del humor tremendo; quizás usted amigo lector de MEEC que al igual que quien suscribe es amigo de Pelagio, no conozca estas cualidades; es posible que Ley Simé quien en una oportunidad fue su vecino, sí recuerde el sentido del humor del hijo de Paisano Gil (QEPD) y doña Tolinga Bonilla (QEPD).

Pelagio es una máquina para recordar anécdotas reales de amigos y las que no, se las inventa.

COSAS DE PELAGIO

1.-En una oportunidad suena el teléfono de mi casa, lo levanto… don Pelagio, lo identifiqué al instante: ¿Sabe quién te habla?, Me pregunta. Le digo que sí. ¡Pelagio!, ¿qué te pasa? Nada, llamándote para saber de ti.

Me pregunta: ¿cuándo vieneS? No sé, ¿por qué? Me contesta lo siguiente: te vas a perder una tremenda oferta que hay aquí en Mao; en el barrio las 40 abrieron un cabaret y tienen un especial esta semana, dos mujeres por una; o sea paga por una y te llevas dos a la habitación.

2.-En una ocasión nos reunimos en el barrio Enriquillo (los cambrones), específicamente donde mi suegra. De repente me dice: llévame a mi casa. No hay problema, mano a la obra. Estacioné el vehículo frente a su residencia en la calle Máximo Cabral. Me dice, espera un momento hasta que yo abra la puerta, luego te vas. Entiendo que lo hacía como una medida de seguridad personal, en días recientes había sido víctima de un atraco.

¡Qué va!, con la puerta entreabierta, llama una de sus hijas y en voz alta, muerto de risa, me señala y le dice a su hija: Mira, Ángel Berto con ese sonmbrerito parece un delincuente. Aproximadamente diez minutos después me llama su hija para decirme que Pelagio seguía riéndose solo.

Salud Pelagio y un abrazo a sus hijos e hijas.

3 comentarios:

  1. Un saludo cariñoso para Don Pelagio a quien conozco desde que tengo uso de razón.

    César Brea

    ResponderBorrar
  2. Pelagio era el "electricista oficial" de nuestra casa. Recuerdo que una vez, se puso a resolver el problema electrico sin tumbar el "swiche machete" (para esa época no existían los "breaks"). Parece que Pelagio se descuidó y el sistema le dio un corrientazo, que se quedó pega'o. Entonces, sólo se escuchaba a Pelagio, con su vocecita inconfundible, gritar: "Vitalino, Vitalino, juiga y baje el swiche machete". Afortunadamente, la situación no pasó de un gran susto para nuestro amigo Pelagio, a quien aprovecho para saludar deferentemente.

    Fernan Ferreira.

    ResponderBorrar
  3. Ay Dios! Pelagio. Somos grandes amigos. Me tenia muy reservado, porque también lo era de su fallecida esposa doña Cecilia. Muchas veces lo sorprendí en tareas que no eran las de electricistas. Mira Ley ten cuidado, me advertía. Cada vez que pasaba por el frente de mi casa, le decía: vas a bregar con corriente eléctrica o con.... Cállate, no ves, esas son las vainas tuyas, porque yo sabia que duraba en un lugar dos horas bebiéndose un refresco de avena. No saco de mi cabeza esa risita. Lo aprecio mucho.
    Ley S.

    ResponderBorrar

Haga su comentario bajo la etiqueta de Anónimo, pero ponga su nombre y su dirección de email al final del mismo: NO SE PUBLICARÁN COMENTARIOS SIN NOMBRE Y SIN DIRECCIÓN DE EMAIL. Los comentarios ofensivos y que se consideren inapropiados, tampoco serán publicados.
El administrador