martes, 27 de abril de 2010
Sony descontinuará floppy
Por Isaías Ferreira
En lo que viene a ser sólo el último clavo en la tapa del féretro, Sony acaba de anunciar que en Marzo del 2011 venderá su último floppy en Japón. Si bien esto declara su muerte oficial, en realidad el floppy ha estado, sino muerto, por lo menos en estado muy delicado, por unos años ya. Apple fue la primera compañía en olvidarse completamente del floppy en la iMac de 1998; Dell la siguió en 2003.
La suerte del venerable floppy es la misma de otros artefactos de máxima utilidad en su tiempo y que el avance de la tecnología ha rendido obsoletos. ¿Recuerdan el mimeógrafo, el telégrafo, la maquinilla?
El floppy fue introducido en 1981 y adoptado rápidamente por la industria, en particular por la primera generación de computadoras Mac de la Apple, la Commodore Amiga, Atari ST, y más tarde las IBM PS/2. Este dispositivo fue uno de los medios de almacenamiento para compartir datos entre computadoras personales durante tres décadas. Sony fue el pionero con el disco de 3.5 pulgadas, que reemplazó al de 5.25 pulgadas.
En cuanto a su capacidad, y he aquí su tendón de Aquiles, ésta variaba entre alrededor de 800KB y 1.4MB, y, aunque este formato no se popularizó, hasta 2.8MB. Imagínese: se necesitarían al menos 3 discos de 1.4MB para almacenar una canción de mp3 de hoy día.
Conforme el tamaño de los archivos y los programas crecieron, el floppy se volvió un formato obsoleto. Con el advenimiento del CD, del DVD, del Zip y el USB, las ventas del floppy en Japón bajaron de 47 millones en 2002 a 12 millones en 2009. Esto último de por si sorprendente.
Quienes somos lo bastante mayorcitos para haber utilizado los discos de 5.25 pulgadas (y hasta los de 8 pulgadas; y los casetes anterior a estos, en mi caso) como medio de almacenamiento, podemos atestiguar del salto cualitativo que significó la aparición del floppy de 3.5 pulgadas. Pero así como celebramos su llegada, abrazamos con fervor las tecnologías que lo sustituyeron. Los floppies son simplemente muy incómodos, frágiles, limitados y feos. Y cuando digo frágil me refiero no a su estructura física, que contrario a los de 5.25 pulgadas tienen una coraza protectora rígida y resistente, sino a la facilidad conque pierden sus datos: hasta un gancho sujetapapeles magnetizado puede borrarlos.
Como se puede ver, no soy de los que voy a extrañar la muerte del floppy… en realidad, para mí hace años que éste vive la vida de los justos… o descansa en los fondos de los mares con los peces, como dicen en el argot de las películas de gánsteres.
En lo que viene a ser sólo el último clavo en la tapa del féretro, Sony acaba de anunciar que en Marzo del 2011 venderá su último floppy en Japón. Si bien esto declara su muerte oficial, en realidad el floppy ha estado, sino muerto, por lo menos en estado muy delicado, por unos años ya. Apple fue la primera compañía en olvidarse completamente del floppy en la iMac de 1998; Dell la siguió en 2003.
La suerte del venerable floppy es la misma de otros artefactos de máxima utilidad en su tiempo y que el avance de la tecnología ha rendido obsoletos. ¿Recuerdan el mimeógrafo, el telégrafo, la maquinilla?
El floppy fue introducido en 1981 y adoptado rápidamente por la industria, en particular por la primera generación de computadoras Mac de la Apple, la Commodore Amiga, Atari ST, y más tarde las IBM PS/2. Este dispositivo fue uno de los medios de almacenamiento para compartir datos entre computadoras personales durante tres décadas. Sony fue el pionero con el disco de 3.5 pulgadas, que reemplazó al de 5.25 pulgadas.
En cuanto a su capacidad, y he aquí su tendón de Aquiles, ésta variaba entre alrededor de 800KB y 1.4MB, y, aunque este formato no se popularizó, hasta 2.8MB. Imagínese: se necesitarían al menos 3 discos de 1.4MB para almacenar una canción de mp3 de hoy día.
Conforme el tamaño de los archivos y los programas crecieron, el floppy se volvió un formato obsoleto. Con el advenimiento del CD, del DVD, del Zip y el USB, las ventas del floppy en Japón bajaron de 47 millones en 2002 a 12 millones en 2009. Esto último de por si sorprendente.
Quienes somos lo bastante mayorcitos para haber utilizado los discos de 5.25 pulgadas (y hasta los de 8 pulgadas; y los casetes anterior a estos, en mi caso) como medio de almacenamiento, podemos atestiguar del salto cualitativo que significó la aparición del floppy de 3.5 pulgadas. Pero así como celebramos su llegada, abrazamos con fervor las tecnologías que lo sustituyeron. Los floppies son simplemente muy incómodos, frágiles, limitados y feos. Y cuando digo frágil me refiero no a su estructura física, que contrario a los de 5.25 pulgadas tienen una coraza protectora rígida y resistente, sino a la facilidad conque pierden sus datos: hasta un gancho sujetapapeles magnetizado puede borrarlos.
Como se puede ver, no soy de los que voy a extrañar la muerte del floppy… en realidad, para mí hace años que éste vive la vida de los justos… o descansa en los fondos de los mares con los peces, como dicen en el argot de las películas de gánsteres.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Haga su comentario bajo la etiqueta de Anónimo, pero ponga su nombre y su dirección de email al final del mismo: NO SE PUBLICARÁN COMENTARIOS SIN NOMBRE Y SIN DIRECCIÓN DE EMAIL. Los comentarios ofensivos y que se consideren inapropiados, tampoco serán publicados.
El administrador