DO-RE-MI
Por Juan Colón
Nació en Santiago de los Caballeros, el 17 de Julio de 1914, hija del gran maestro don Emilio Arté y Ercilia Ventura (doña Cila), nieta del célebre músico español don Rafael Idelfonso Arté, muy destacado en Santiago ciudad en la cual una calle su nombre.
El instrumento que mejor llegó a dominar fue el Piano; sin embargo, también dominaba el bandoneón, el violín, el cual tocaba desde los seis años de edad. Luego, en la enseñanza, enseñó saxofón, guitarra, flauta, bajo, trompeta, trombón de vara y otros instrumentos. Su escuela estaba ubicada en su domicilio.
Contrajo matrimonio con el Sr. José Ramón Paredes Mena, oriundo de San Francisco de Macorís; no procrearon hijos.
Le cupo la gloria de formar parte de la pléyade de Jóvenes valores musicales que Mao tuvo en el período de los años 1940-1950, entre ellos Radhamés Reyes Alfau, Otoniel Acevedo, Guarionex Aquino, Dr. Rafael Rodríguez Colón, Daniel Colón, Guaroculla Fondéur, etc.
Su casa era visitada por muchos grandes músicos de la ciudad capital y Santiago: Luis Alberti, Johnny Ventura, Rafael Martínez (cantante), Rafelito Martínez (de la Vega, director musical). Durante años fue la organista de la Iglesia Parroquial de Mao, y mientras el padre Franco oficiaba la misa en la Iglesia de la Esperanza, ella armonizaba con su dominio del órgano la música de fondo y para los coros.
Ingresó muy joven a la Banda de Música de Mao, la cual llegó a dirigir por unos diez años. Luego se traslada a Esperanza, en el 1948, y funda la Banda Municipal de allí, siendo directora musical de ésta por espacio de diez años.
Como pianista ofreció conciertos en diferentes pueblos del país. En Santiago se presentó con rotundo éxito en el Ateneo Amantes de la Luz, en el Centro de Recreo, etc. En el Club Quisqueya de Mao se presentó en un concierto para Piano y Flauta, con el famoso Pedro Echavarría “El Ruiseñor de América”, interpretando los vals del momento, serenatas, y una sección donde el gran poeta maeño Juan de Jesús Reyes declamaba sonetos de su autoría.
Acompañó al prodigioso violinista Mocano Gabriel del Orbe; también dio un concierto para dos pianos junto a Julio Alberto Hernández.
Trabajó como profesora en el Salón de Estudios Mozart, en la calle el Conde de la ciudad Capital, también actuó en el archifamoso Teatro Agua y Luz del Centro de los Héroes en la capital, y en la Casa España.
El poeta maeño, don Parmenio Reyes escribió un poema para ella; sólo recuerdo una frase: “Versos y flores quiero para Antonia Arté”, distinguida artista y amiga.
Mujer de una gran belleza, serena, pausada en el hablar, caminar, hermosa de alma y de esencia. Recuerdo sus clases por las tardes. Mi padre me llevaba a su domicilio.
Muchas veces tenía que esperar que el café y el cigarrillo entre ella y mi padre terminaran para darme clases de solfeo y canto. Heredó de su padre y su madre su gran educación natural, sus modales, su forma de vestir, su pulcritud, su forma de llevar el pelo. La recuerdo con mucha admiración y mucho respeto, era para mí una diva de verdad sin tener yo la menos idea de que era una diva. Mujer ideal para un soñador de la sublimidad de una escala musical.
Vivió sus últimos años con su adorado sobrino-hijo (porque lo adoraba como si fuere su propio hijo) Francisco Arté (Brichy) recibiendo el cuidado de la familia.
Doña Tontón murió el 4 de Julio del 2000 brindándole su última sonrisa a su querido Brichy.
El ayuntamiento de la ciudad de Mao, decretó tres días de duelo por su muerte.
Por su gran labor fue objeto de innumerables homenajes y reconocimientos. He aquí algunos de ellos:
• Hija adoptiva del Municipio de Mao, año 1975.
• Reconocimiento de AMUCABA, asociación de músicos, cantantes, bailarines y locutores, en el 1975 también en Mao.
• Pergamino de Reconocimiento de la Patria por Dentro, Hija distinguida, en el Night Club El Maunaloa, 1982.
• Premiación en Los Premios La Cotorra, en Santiago, 1986.
• Hija adoptiva del municipio de Esperanza, 1999.
Y muchos otros que por asunto de espacio no puedo incluir aquí.
Tontón Arté, gloria sublime de nuestros atardeceres, mujer inolvidable para todo el que tuvo el privilegio de tratarla o recibir sus enseñanzas y humanismo.
Que descanses en paz eterna profesora. Mi eterna gratitud y admiración.
domingo, 11 de abril de 2010
ANTONIA MAGDALENA ARTÉ (Doña Tontón)
Etiquetas:
Biografía,
Juan Colón,
Personajes,
Reseña
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Muy merecido reconocimiento a Doña Tonton. A ver quien se anima a escribir de nuestro querido Lucero o de Don Blas y aun de ti, Juan, que tambien eres un gran musico.
ResponderBorrarJanio
Janio,
ResponderBorrarYa la de Lucero está escrita y la de Humberto Reyes... para verlas, sólo tienes que ir al índice de temas, a la derecha del blog, y hacer clic en Juan Colón, y verás todos sus escritos...
Isaías
Juan,
ResponderBorrarMe da gran placer al leer tus escritos de nuestras grandes glorias musicales. Aun siendo mucho de estos de otros lugares de nuestro pais, hicieron de Mao su casa. A travez de tus escritos he podido conocer estos celebres musicos. Gracias por tu aporte a este blog y a mi conocimiento. Resido en NJ y me gustaria oirte tocar y asi conocernos.
Janio
jperez@milfac.com
Doña Tontón
ResponderBorrarSiempre admiré esta gran mujer , disfrutaba cuando la veía tocar su piano era los más agradables momentos de mi vida; que en innumerables ocasiones hice realidad, la calle Emilio Arté era mi favorita, tenía 12 años y por primera vez vi un piano que tanta veces soñé tener y aprender a tocar , mis pasos eran tan lento al pasar frente a su residencia para observar la señora del piano como tantas veces le dije en mi interior a Doña Tontón .Generalmente su casa permanecía cerrada , pero yo observaba por las pequeñas rendijas de las tablas cuando impartía sus clases de piano , luego cada domingo en el parque me maravillaba al ver como dirigía toda esta banda integrada por músicos ,hombres generalmente.
Hoy al ver ese escrito llore por la emoción, la alegría de saber que aun la recuerdan como yo. Siempre paso por la Emilio Arté esa calle tiene una magia especial para mí
Aunque, no nací en Mao todas mis vivencias de niña y adolescente están impregnadas en las calles de mi pueblo como las notas musicales del piano de tontón que aun suena silente en mi mente.
Siempre te recordaré mujer del piano.
Doris Rodríguez.
Doris, hermoso relato lleno de humanismo, respeto y admiración a nuestra amada y recordada doña Ton Ton. Todavia tienes tiempo de aprender a tocar, no importa edad, solo dejar que tu espiritu te colme de serenidad y perseverancia, y veras en poco tiempo tu sueño realizarse. No te rindas, si estuviera en Mao te ayudaria a realizarlo, solo decidete, y veras que hermoso es tocar un instrumento y mas cuando es el que llevamos en el alma. Felicidades por tu precioso comentario.
ResponderBorrarSinceramente,
Juan Colón
Gracias Juan por esta breve recena de Dona Tonton,siempre la admire no solo como artista sino como un excelente ser humano.Ella me brindo su amistad y su respeto.Sin pedirlo fui acogido en su familia ya que mi madre adoptiva fallecida hace apenas un ano Francisca Arte (Pancha)fue la que me introdujo en sus vidas.
ResponderBorrarJose Rodriguez.
Joserafael41@hotmail.com