NACERÉ DE NUEVO

REFLEXIONES
Por Lavinia del Villar

“Vamos, pues, a vivir un vivir puro,
un vivir nítido.
Ayer ya se perdió: ¿fui malo? ¿bueno?
…Venga el olvido,
y quede sólo de ese ayer, la esencia,
el oro íntimo
de lo que amé y sufrí mientras marchaba
por el camino…”

Amado Nervo

Hay quienes piensan que si he cometido un delito en mi vida,
siempre seré un criminal.

Lo doloroso de esta creencia es que yo también formo parte de ella.

A veces quisiera el perdón de los demás, pero la verdad es que aún yo no me he perdonado. El perdón debe venir de mí primero.

¿Fui malo? ¿fui bueno?… Venga el olvido.

Ayer… ¿Por qué sigues ahí? No soy lo que hice. No soy mis errores.
No soy mis culpas. No soy mis fracasos. Soy un ser humano con virtudes y defectos, pero soy yo. Puedo nacer de nuevo cada día, si me lo propongo, si me lo permito, si me perdono, si me aprecio, si me quiero, si me valoro…

No voy a denegar mis fallas, voy a aprender de ellas, sin vivir por ellas.
La verdad es que yo cambio cada día. Cada día que pase voy a decirme: “Hoy he nacido.” Pero, voy a entender que no puedo reclamar el perdón de los demás, aceptar su ayuda, y luego vivir como me plazca. Necesito un nuevo plan, necesito reconstruir, fortalecer, y recuperar mi sanidad.

“Hay una relación estrechísima entre la resurrección de Jesucristo y la transformación del hombre.”, dice la revista Rayo de Luz, en su edición de Abril, 2010, por eso, yo pondré mi voluntad y mi esfuerzo en mi nueva vida. Me transformaré. Lo puedo hacer… Lo haré… Naceré de nuevo.