martes, 30 de noviembre de 2010
PUDO HABER SUCEDIDO ASÍ... O CASI
“CONSÍGUEME ESO", MERENGUE CLÁSICO DEL COMPOSITOR LUIS ALBERTI
Por Manito Santana
Relacionado: ¿QUIÉN NO RECUERDA A PAPARIRO Y A SU ETERNO AMOR, LA MELLIZA?
¿Qué quería Luis Alberti que le consiguiera su novia?
Esto quiere saber mi hermano César Brea (y un grupito de mal pensados entre ellos un tal Evelioke y el Director de MEEC, siempre dizque tan correctos) luego de yo explicar de qué quería Papariro que la Melliza le diera un chin.
Don Luis Alberti gran músico dominicano, antiguo director de la famosa orquesta Santa Cecilia, antigua Generalísimo, preferida por el tirano Trujillo, siendo sus cantantes Rafael Colón y Pipí Franco.
Ya que me he visto obligado a mencionar esta orquesta, aprovecho para narrar algo que sucedió con la mencionada, iniciando uno de los famosos bailes del otrora Samoa Bar y Trujillo.
Se inicia el baile, Samoa repleto de un público con sacos y corbatas y en cada una de las mesas un litro de whisky o un CARLOS-I (antes en esos bailes nadie tomaba ron criollo), y el primer merengue de la fiesta es interrumpido o cortado por la mitad; lo que trae como consecuencia comentarios y disgustos ya que ignoran las razones. De pronto, el presentador de la orquesta pide excusas y dice que la fiesta fue suspendida porque "el generalísimo Trujillo mandó a buscar la orquesta para una fiesta de las suyas".
Todo el público aplaudió lleno de gozo que la orquesta se había ido a tocarle al jefe. Eso se llamaba poder Absoluto e ignorancia involuntaria de un pueblo.
Volvamos al tema de "Consígueme eso", interrogante de qué quería conseguir, y el prejuicio de gentes morbosas que se las dan de que saben lo que quería Luis que le consiguiera su novia. Y cualquiera lo piensa cuando le dice "Consígueme eso, no sea tan mala mulata consígueme eso, mira que sufro por ti muchachita linda"
Bien, la historia es esta: Luis está donde la novia comiendo gallina, y parece que ese día el suegro mandó a limpiar todos sus zapatos y no los había guardado. Luis se sorprende al ver tantos pares juntos, ya acostumbrado a uno o dos pares dada su cortedad monetaria.
Entre ellos, salían a relucir unos blancos que dieron motivo a que Luis pensara lo bonito que a él como artista le lucirían y no vaciló en decirle a la novia "tu padre tiene muchos zapatos" a lo que ella asintió diciéndole: "y eso ,que allá dentro hay más… si tú quieres alguno yo te lo doy", y él le ripostó rápidamente sí, sí, lo necesito"; "consígueme esos" señalando los blancos con un movimiento del hocico, ya que no pudo hacerlo con un dedo. Ella se lo negó porque eran los únicos blancos que tenía su papá; pero él siguió insistiendo por más de una hora que le consiguiera eso, y ella que no, hasta que por fin… se fue de la casa.
Al poco tiempo, Luis está tocando una de sus fiestas y en una mirada alcanza ver a su novia acompañada de su padre trajeado con zapatos blancos, ella mira a Luis y se fija en sus zapatos, que son negros y los dos fijan sus miradas y con sus pensamientos conversan y ella le dice "no te puedes quejar" y él le contesta "no, yo no me estoy quejando, gracias" y ambos externaron una ligera sonrisa disimuladamente.
Esa es la historia mi amigo César, ahora bien si tú o algunos de los lectores consideran que no fue así, pues sigan pensando de la otra manera. Quién sabe, a lo mejor estoy equivocado.
Por Manito Santana
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¿Qué quería Luis Alberti que le consiguiera su novia?
Esto quiere saber mi hermano César Brea (y un grupito de mal pensados entre ellos un tal Evelioke y el Director de MEEC, siempre dizque tan correctos) luego de yo explicar de qué quería Papariro que la Melliza le diera un chin.
Don Luis Alberti gran músico dominicano, antiguo director de la famosa orquesta Santa Cecilia, antigua Generalísimo, preferida por el tirano Trujillo, siendo sus cantantes Rafael Colón y Pipí Franco.
Ya que me he visto obligado a mencionar esta orquesta, aprovecho para narrar algo que sucedió con la mencionada, iniciando uno de los famosos bailes del otrora Samoa Bar y Trujillo.
Se inicia el baile, Samoa repleto de un público con sacos y corbatas y en cada una de las mesas un litro de whisky o un CARLOS-I (antes en esos bailes nadie tomaba ron criollo), y el primer merengue de la fiesta es interrumpido o cortado por la mitad; lo que trae como consecuencia comentarios y disgustos ya que ignoran las razones. De pronto, el presentador de la orquesta pide excusas y dice que la fiesta fue suspendida porque "el generalísimo Trujillo mandó a buscar la orquesta para una fiesta de las suyas".
Todo el público aplaudió lleno de gozo que la orquesta se había ido a tocarle al jefe. Eso se llamaba poder Absoluto e ignorancia involuntaria de un pueblo.
Volvamos al tema de "Consígueme eso", interrogante de qué quería conseguir, y el prejuicio de gentes morbosas que se las dan de que saben lo que quería Luis que le consiguiera su novia. Y cualquiera lo piensa cuando le dice "Consígueme eso, no sea tan mala mulata consígueme eso, mira que sufro por ti muchachita linda"
Bien, la historia es esta: Luis está donde la novia comiendo gallina, y parece que ese día el suegro mandó a limpiar todos sus zapatos y no los había guardado. Luis se sorprende al ver tantos pares juntos, ya acostumbrado a uno o dos pares dada su cortedad monetaria.
Entre ellos, salían a relucir unos blancos que dieron motivo a que Luis pensara lo bonito que a él como artista le lucirían y no vaciló en decirle a la novia "tu padre tiene muchos zapatos" a lo que ella asintió diciéndole: "y eso ,que allá dentro hay más… si tú quieres alguno yo te lo doy", y él le ripostó rápidamente sí, sí, lo necesito"; "consígueme esos" señalando los blancos con un movimiento del hocico, ya que no pudo hacerlo con un dedo. Ella se lo negó porque eran los únicos blancos que tenía su papá; pero él siguió insistiendo por más de una hora que le consiguiera eso, y ella que no, hasta que por fin… se fue de la casa.
Al poco tiempo, Luis está tocando una de sus fiestas y en una mirada alcanza ver a su novia acompañada de su padre trajeado con zapatos blancos, ella mira a Luis y se fija en sus zapatos, que son negros y los dos fijan sus miradas y con sus pensamientos conversan y ella le dice "no te puedes quejar" y él le contesta "no, yo no me estoy quejando, gracias" y ambos externaron una ligera sonrisa disimuladamente.
Esa es la historia mi amigo César, ahora bien si tú o algunos de los lectores consideran que no fue así, pues sigan pensando de la otra manera. Quién sabe, a lo mejor estoy equivocado.
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Cabezón,
ResponderBorrarUsted lo que es un "sangrú"... ¿cómo se va a referir a un santo como yo de esa manera?
Isaías
Manito,
ResponderBorrarSi no fue esa la historia real, la imaginacion se extendio leeeeeejos con eso de ser zapatos. Prefiero creer que fue "otra cosa" la que el maestro queria que le consiguieran.
Janio Perez Estevez
PD Isaias, Manito no es sangrú ni tu eres un santo. "Nos conocamos to!"
Janio,segun me enteré él le dijo"consígueme eso"insistió,insistió, y por fin,,,con todo su amor cedió.
ResponderBorrar2 semanas despues,en una de esas fiestas animadas por Luis,hace su llegada la novia acompañada de su Padre,de repente ,ella mira sonriente y nota su novio con los zapatos blancos puesto,por cierto con muy bonita combinación; ambos en una mirada,ella se rie reservadamente y él con un pliegue de boca le muestra su ligero enfado y ella con una comunicación mental le dice "¿y por qué estás enojado? te dí los zapatos ¿que mas querías ?
él se quedó mirandola fijamente por unos segundos y le contestó " mejor me quedo callado"
esbozando un sonreir condicionado.
Esa fue otra versión Janio. ¿qué tú crees ?
Abrazos
Manito
Querido Manito: Me encantó este relato, porque en mis tiempos para algunos mayores, "consigueme eso" era una mala palabra. No sabía que tuviera una historia tan tierna. Te quiero felicitar por tu activa participación en MEEC con temas tan agradables y relajantes.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo. Lavinia
Ahora si que llegamos a una cualidad puramente Dominicana...el doble sentido! Son innumerables los merengues que tienen doble sentido y con este ultimo relato salieron a relucir las verdaderas intenciones del maestro.
ResponderBorrarConforme...
Janio Perez