Por Ángel Berto Almonte
(Dedicado a Rolando Espinal)
En la foto, a la derecha, el señor Víctor A. Castillo recibe una placa de reconocimiento a su labor de años. Me imagino que les va a sorprender el nombre, los maeños solo lo conocemos como “Paquito el que hace gorras”.
Tremendo ser humano, dedicó toda su vida a confeccionar uniformes y gorras para peloteros. ¿Quién de nuestra época no conoció a Paquito?
Nuestro amigo residía en la calle Máximo Cabral, casi esquina Restauración, en el barrio de Sibila; era prácticamente vecino de Ley.
Hace unos años sufrió un accidente cerebro vascular (pérdida de las funciones cerebrales producto de la interrupción del flujo sanguíneo), pero ya se encuentra bien y junto a su esposa Quinita y sus hijos, reside en la ciudad de Paterson, en el estado de New Jersey.
En la foto recibe un reconocimiento a su labor por parte del Sr. Héctor Sánchez, Presidente de la Fundación de la Esperanza y el Progreso (FUNDEPRO).
Foto: Cortesía de Próspero Rodríguez
Paquito es un gran ser humano que por la dedicación y la seriedad con que se empeñó por años en su profesión merece todo nuestro respeto. Un placer saber que está bien, maestro. Reciba nuestro mas caro abrazo.
ResponderBorrarIsaías
El señor Paquito, ademas de ser el maestro de la confeccion de uniformes (incluyendo el de las aguilas cibaeñas), tambien fue un gran seguidor del beisbol amateur de todos los tiempos.Fue el quien me hizo llegar la foto que publicamos en nuestro articulo Beisbol Romantico, de reciente publicacion. Loor a Paquito gran amigo y excelsa persona.
ResponderBorrarRolando Espinal.
Nota:Gracia,Angel Berto, por dedicarme un acto en el que se premia un hombre tan grande como mi amigo :Paquito:
Es grande el cariño que existe entre esa familia y un servidor. "El Paqui" como siempre le decimos, tenia un lugar fijo en el estadio, para no decir un asiento. Recuerdo que convenimos saludarnos poniendonos la mano sobre el hombro, porque al darle la mano le clavaba una uña encima del pulgar. En sus primeros tiempos en la confeccion de uniformes, eramos el artista de las letras que se le pegaban a los mismos. Luego se convirtio en el artista completo.
ResponderBorrarMucha vida y salud para Paqui y familia, donde quiera que este.
Ley S.