viernes, 21 de enero de 2011

ANTONIO MOREL

DO-RE-MI
Por Juan Colón

Para muchos este nombre no dice nada extraordinario, es un nombre común, pero no lo es en la historia del merengue.

La calidad sonora de su orquesta fue el arma que lo convirtió en un fenómeno de popularidad por el año1946. Con apenas 25 años, este inquieto músico coge las riendas de la orquesta Antillana la cual había fundado Enriquillo Sánchez.

Morel nació en La Ceiba de los Cabrera, Moca, en el 1920. Es el primer fenómeno de popularidad como orquesta merenguera. No fueron su figura ni su carisma los responsables de este gran éxito, sino la calidad de sus temas y sus intérpretes que logran un gran apoyo de la población. Su éxito es tan meritorio que pudo competir en buena lid con las ya existentes orquestas Generalísimo, dirigida por Luís Alberti de la cual el padrino era el propio Trujillo, y la Súper Orquesta San José, dirigida por Papa Molina, cuyo padrino era José Arismendis Trujillo (Petán).

Su orquesta estaba por encima de esas dos, su repertorio era nucho más amplio; tenía danzas, vals, guarachas, mambos, fox trots, jazz, swing, y, por supuesto, merengues. Siendo este último el que le dio el verdadero triunfo delante de la población.

Aunque tocaba clarinete y oboe, el Bandoneón era el instrumento que tocaba al frente de la orquesta.

Morel era un músico académico, estudió con el profesor Federico Camejo en el pueblo de Tamboril, luego siguió sus estudios en la ciudad capital.

Los mejores músicos de la época y cantantes pasaron por esta gran orquesta. Era el pasaporte del músico para que lo consideraran como profesional; si podía tocar el repertorio de esta orquesta, esto le garantizaba tocar con cualquiera de las otras.

Por su orquesta pasaron Luis Vásquez, “El Trovador de las Damas”, y Francis Santana, entro otros. Este último grabó un merengue haitiano que se convirtió en el más grande fenómeno de popularidad entre los años 1948-1955: Massá-Massá. Claro, cuando Morel tocaba bailes donde estaría Trujillo, este merengue estaba prohibido tocarlo. Entre los otros cantantes y artistas que en sus mejores tiempos pasaron por esta prestigiosa orquesta están Lope Balaguer, Flor de Liz, Alberto Beltrán, Vinicio Franco, Lucía Féliz, Rafael Peguero “El negrito Macabí”, Rafael Martínez, Niní Cáffaro,

Quien escribe tocó en esta orquesta aunque en sus tiempos finales, 1968-69, de la cual solo quedaba el nombre hecho por este gran músico.

Algo inusitado de este fenómeno musical nuestro fue que llegó a tener su propio sello disquero “Morel”, y así mercadeaba sus discos a su manera; luego grabó para los sellos Mozart, Marvela, Decca y La Guarachita.

Después del gran éxito de Massá-Massá, también le siguieron el merengue San Cristóbal, en honor al Jefe, y Apágame la Vela, este último en la voz de Vinicio Franco.

A finales de los setenta Morel enferma y desaparece del medio artístico hasta la hora de su muerte por los alrededores de 1976-77.

Sello indiscutible de calidad musical es lo que se siente cuando se habla de este gran músico nuestro Antonio Morel. Paz a sus restos.

LA AGARRADERA – ANTONIO MOREL Y SU ORQUESTA

2 comentarios:

  1. Definitivamente, uno de los grandes de nuestra música de la época de nuestros big bands: Papa Molina, la Santa Cecilia, Luis Pérez y Rafelito Martínez de La Vega.
    Gracias, Juan, por otro plato delicioso.
    Isaías

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  2. Gracias Maestro por sus interesantísimos artículos musicales. De forma sencilla, amena y sobre todo educativa, realza la grandeza de nuestros más connotados músicos. Usted es uno de esos grandes.
    Mi siempre eterna admiración!!!.
    Abrazos,
    Diómedes Rodríguez.

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