Taverita

Cosas de Mao
Por Isaías Medina Ferreira

Alcibíades Taveras, “Taverita”, como le decían, era un señor que tenía un pequeño negocio por el barrio de los Taveras, por la Beller y 27 de Febrero. Taverita era alto de estatura. Su caminar encorvado era lento y trabajoso, producto quizás de que era medio rechoncho y sufría de las piernas. Taverita era alborotao al hablar y tenía una voz atiplada, tan alta y chillona que invadía el tímpano como el pito de las pruebas de emergencia radiales.

Siempre que se encontraba con José Fermín Francisco (Mimín), un popular pelotero de entonces, éste le decía: “Taverita, y dique uté ‘e rico”; o si no, el mismo Taverita le recordaba, “Adió, Feimín, pero tú no me ha preguntao hoy si yo soy rico”. Y Fermín, para seguirle la corriente, le preguntaba, “Taverita, ¿y e veidá que uté e’ rico?” La respuesta de Taverita no se hacía esperar: “Oye… oye que si soy rico… oye que si soy rico... eta mañana hice ei luitimo inventario, y me faitaban cinco chele pai millón... Feimín, dame lo cinco chele pa’ completai ei millón”; “Taverita, pero yo creí que uté lo había completado la última ve que no vimo”, le decía Fermín. “Feimín, tacaño ei diablo, ¿pero que tú te cré?, un hombre como yo tiene gasto, sí”.

De Taverita se dice también que su gran orgullo era tener los tramos de su negocito abarrotados de ron de todas las marcas de entonces. Tanto le enorgullecía, que a veces pasaba horas contemplando sus tramos y sonriendo, y en ocasiones hasta rehusaba vender una botella, “pa’ que lo tramo no queden diparejos…”

Anotaciones:
José Fermín Francisco, Mimín, jugó segunda base con el equipo amateur de Mao y con el Centro de Enseñanzas de las Fuerzas Armadas. Mimín se desempeñó por muchos años como practicante médico en el Hospital Ing. Luís L. Bogaert. En la actualidad vive en Salem, Massachusetts.