miércoles, 23 de septiembre de 2009

Los "Cachila Brass"

Cosas de Mao
Por Isaías Medina-Ferreira

En su historia, de las entrañas de Mao han nacido varias agrupaciones musicales. Vienen a la mente las de Lucero Colón, quien fundara un par de ellas, en las que dieron sus primeros pasos Juan Colón, su hijo, uno de los mejores saxofonistas que ha dado la RD; Papo Núñez, buen trompetista, quien ha tocado con las mejores agrupaciones del país incluyendo a Johnny Ventura y a Ramón Orlando; Darío Estrella, considerado por muchos un genio de la música, pero que se autodestruyó, y otro saxofonista extraordinario, Humberto Reyes, a quien se le conoció como “el chivo, el musiquito o el guajirito”.

¿Cómo olvidar el “Teléfono a larga distancia”, cuando Rico Luna salía al parque con su trompeta y Lucero desde el Samoa le contestaba la melodía quejumbrosa de esa interpretación famosa? Entre los otros grupos que se destacaron localmente y en los alrededores están los Cachila Brass, Alcedito y sus muchachos típicos, Los Chea, Sergio El feo y su grupo, y Ricardo Gutiérrez, quien al escribirse estas líneas todavía está activo y ha tenido, además, proyección nacional.

De todas esas agrupaciones, sin embargo, ninguna ha dejado un recuerdo más vívido e imperecedero entre quienes disfrutamos de su música que Los Cachila Brass. Lo de “Brass” era en referencia a un conjunto norteamericano de música instrumental-jazz, los “Tijuana Brass”, que estaba de moda en esos tiempos. Es posible que nuestros ‘Brasses” no fuesen los de mayor calidad musical, pero sí fueron los más genuinos y los más pintorescos, y por lo tanto los que tuvieron mayor impacto en la imaginación del pueblo, al que legaron un sinnúmero de anécdotas y recuerdos.

Todavía debe repicar en los oídos de quienes se estrujaron al ritmo de los Cachilas, “.... ¡la llave!, ¿dónde está la llave?… cuando me emborracho, rracho, no sé que me pasa, pasa, no encuentro la llave, llave, no encuentro la casa... (coro) ¡la llave!, ¿dónde está la llave?”, su interpretación más famosa, la cual comenzaba como bolero montuno y cogía velocidad hasta que todo el público bailaba a velocidad de rayo y hacía un coro estruendoso sacando llaveros y repitiendo “¡la llave!, ¿dónde está la llave?”. Fue tanto lo que tuvieron que interpretar la dichosa llave, que una vez me dijo Bolívar: “¡la llave me tiene el ombligo como un chele ‘e salsa!”. Pero nada, que yo sepa, no creo que alguna vez se negaran a tocarla.

En los Cachilas todo llamaba la atención, comenzando con sus cantantes Bolívar Ventura, de 6’5” de estatura y Luis José, de 5’6”. Esto, al tener un solo micrófono, como podrán imaginarse, creaba un gran problema cuando debían hacer dúos.

Bolívar, que era muy buen cantante, tenía, además, un gran sentido del humor, y cuando terminaba de cantar, en su voz grave y particular solía comentar al público cosas tales como: “Buena harina, buena harina”; “Iban tan apretados, que están sudando espaguetis”; “Sal Andrews, Sal Andrews”; “...Y recuerde que Brugal refresca su memoria”; “Si toma para olvidar, pague antes de tomar”. O si no, cosas picarescas tales como “Carlitos si te vas, deja la pistola ya”; “Mamá se quema la malla”; “Repica Joselo, que Morelo alza vuelo”; “Harina fina, aunque pareca almidón”. A veces, cuando Cachila, quien además de ser director del grupo tocaba la guitarra, se perdía en la música, le decía Bolívar: “Compadre, la próxima vez, deje dirección”, lo cual, demás está decir, molestaba sobremanera a Cachila, su compadre del alma. Sin embargo, por lo que recordaremos más a Bolívar es por la frase: “¡qué sería de los pobres si Dios cortara toda fuente de espaguetis!”.

Uno de los músicos de Cachila, Lolo, el saxofonista, era muy bueno, pero como decía Luis José, era “temperamental” y por lo tanto impredecible. Si uno de los “tígueres” iba y le decía: “Lolo, esa muchacha hace rato que lo está mirando mucho”, él podía contestar “¡déjala que mire!”, de mala gana, o podía lucirse metiéndose dentro de la multitud de bailadores tocándole exclusivamente a ella, sin importar que fuera un merengue, una güaracha o un bolero. A veces, Bettis, quien a pesar de que la polio lo había dejado en silla de ruedas vivía una vida muy productiva, y tenía la de músico entre sus muchas profesiones, los acompañaba con su saxo alto. Un día, en medio de un “solo”, en que está Lolo “regao” dando notas a lo Félix del Rosario y el Manso, entra Bettis con su saxo a hacerle coro y a Lolo le enfadó tanto eso, que paró la música y fue al micrófono y dijo: “querido público, yo he parado la música, porque Bettis se cree que sopla y no sopla ná”.

¡Ah, Los Cachilas! ¡Fueron únicos! En tiempos difíciles como eran aquellos, su música era un antídoto efectivo para contrarrestar la inseguridad y el ambiente intimidante que se vivía, a pesar de que una vez, en tiempos de la Revolución de Abril en que tocaban en el Club Juvenil, hubo una corredera de todos los demonios cuando interpretando “… y dicen que Caamaño no ganaba ná… Caamaño un hombre guapo jefe e’ la revolución, ay, ay, ay, Caamaño si ganó…”, la guardia roció el área a tiros. Estaban los instrumentos “regao” por doquier, y los jirones de piel, los pedazos de camisas y pantalones y las “cabelleras” guindando en los alambres de púas, que metía miedo.

Tanto Bolívar como Cachila hace unos años que se fueron hacia su morada final, pero donde estén, le decimos gracias por la música, gracias por los momentos amenos y gracias por ser únicos. Extendemos nuestra gratitud a quienes estén vivos del grupo.

Glosario:
Sal Andrews = Polvo, parecido al Alka-Seltzer, que al ligarlo con agua se volvía efervescente, el cual decían era bueno para los dolores de estómago y para aliviar resacas.

Félix del Rosario = famoso músico dominicano, director de los Magos del Ritmo, agrupación de sólo 6 músicos, de fama internacional que con dos saxofones y sin trompetas, incursionaba en varios ritmos entre los que estaba el jazz, el bossa-nova, el merengue, el bolero y el guaguancó.

El Manso= saxofón barítono de los Magos del Ritmo, el conjunto de Félix del Rosario.

9 comentarios:

  1. Isaias, recuerdo que en un escrito sobre Los Cachilas que habías hecho antes, mencionabas algo sobre un Sandwich que uno de los músicos pedía caminando desde la tarima hasta la cocina, pero esta vez no hablas sobre eso...

    Edita el escrito e Inclúyelo si se puede, porque considero muy anecdótica esta parte jejeje...

    Hugo Castillo Torres

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  2. Sí, Huguiño, es cierto que en otra versión de este escrito hay alusión a esa cómica escena, pero en mis averiguaciones nunca pude constatar que fuera cierto y por tanto, aunque a veces exagero, no puedo difundir algo que en el mejor de los casos no es cierto y en el peor podría interpretarse como burla.
    Un abrazo.
    Isaías

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  3. Isa:
    Algunas veces una mentirita piadosa, adorna el entorno del relato. No creo que esto sea malinterpretado. Todo lo contrario, hace al relato mucho más ameno y jocoso, es un pecado venial que no hay que confesarlo.
    Saludos
    Pablo

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  4. Sí, pero estos son hechos reales mis queridos Huguiño y Pablito
    Isaías

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  5. que lindo es toda vivencia toda una realidad sana de nuestro querido mao y sus glorias y la vardad de isaias debemos estar agradecidos llevarnos en la maquina del tiempo a pasar por esos lugares que llevados de las manos de nuestros ancestros pudimos vivir donde pequeños nos cabeseabamos,nos dormiamos en las sillas mientras ellos lo bailaban y disfrutaban al recordarlo nos quita edad nos baja de peso y nos hace sentir volver a crecer gracias isaias dios tenga a tantas gloiria nen su regazo como remanzo de paz,amen atte williams colon ,locutor mao.

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  6. Hola Isaias:
    Te habla Dario Estrella. tengo que darte la razon cuando dices que tuve una etapa autodestructiva. Sin embargo, debo darte la buena noticia de que Dios me dio una segunda oportunidad y te invito a entrar a mi pagina de Facebook (Dario Estrella) y que entres a mi seccion de fotos, ahi veras todos los reportajes de periodico y las fotos que cubrieron los conciertos que sin falta he realizado anualmente en RD, ETC. Aqui no puedo resumirlo todo, solo entra... Si es posible me gustaria que escribas ahora sobre como un artista o persona comun tiene la oportunidad real de dejar los vicios, yo soy un testimonio vivo de eso...Saludos

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  7. No se a que escenario aludía o se refería Bolívar cuando evocaba: "Cementerio de hombres vivos y cuna de los ladrones". estaría él refiriéndose a nuestro país? La verdad no lo sé. Lo cierto era que cuando él llegaba donde Pepe y pedía una boruga o un morir soñando, le ponía un pan sobre el vaso y decía delande de todos los clientes: Miren el desayuno de un artista dominicano!

    Lo saluda, Ley S.

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  8. Inmiscuyéndome en el esrito de Isaias, hay que aclarar que en esa fiesta del club juvenil, los cachilas estaban tocando el merengue de Caamaño; pero Bolivar, hábilmente, cuando escuchó las ráfagas de ametralladora,en fracciones de segundos,cambió el merengue de Caamaño, por la famosa llave, para que no se enteraran de lo que estaban tocando.

    Rolando Espinal

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  9. Me gustan todos tus escritos, pero este debe ser uno de los mejores tuyos. Gracias por las memorias.
    Niño Almonte

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