Bienvenido a nuestro pueblo,
a mi casa puedes llegar.
Tomaremos café en familia,
gran momento para celebrar.
El anhelo de todo maeño
es que el mundo disfrute de paz
Que florezca amor por doquiera,
cual un sueño de blanca verdad.
Bordemos con hilos de oro,
la bandera del bien proceder.
Quienes marchen con sanos principios,
bellas rosas verán florecer.
El arado rompe la tierra,
y el sudor la hace parir.
Nuestro escudo se ve muy triunfante
anunciando un mejor porvenir.
Nuestro pueblo está lleno de gloria
con orgullo podemos narrar.
Que la gesta de La Barranquita
es un templo de honor nacional.
Ayer nos reunimos en la Santísima Trinidad sus amigos de siempre: Diogenito, Nana, Masín Colón, Estervina de Colón, Yolanda Peña, Arismendy Bonilla, Mumú y Dalba de Muñoz, Evelio Martínez y yo, a recordarle con el mismo cariño de siempre.
ResponderBorrar¡Descansa en paz, amigo del alma!
Fernan Ferreira.
Parece que fue ayer,todavía creo que está ejerciendo tu profesión de Médico Cardiólogo,haciendo cumplir el Juramento Hipocrático,preocupándote por la salud de todo maeño conocido y sin conocer y de otros sitios,sin pensar en el papel moneda,sino en hacer el bien.Cuanto quería a tu pueblo Ningue y a tu País.Revolucionario completo.
ResponderBorrarDios sabe donde te tienes.
Manito
En mi intimidad, siento que Taverita no se ha marchado de este mundo; siento que mas bien está de viaje,y que en algún momento nos encontraremos. Tu recuerdo, no perecerá nunca amigo.
ResponderBorrarRolando Espinal