viernes, 16 de enero de 2015
VÁLIDAS INQUIETUDES ANTE AGRESIONES DE HAITIANOS
Por Fernando Rodríguez Céspedes
Existen razones válidas para preocuparse ante los últimos hechos que involucran a nacionales de la vecina isla que persisten en mantener una actitud agresiva frente a los dominicanos, llegando al extremo de acosar y sitiar al personal del consulado de Anse-A-Pitre, hasta tanto fueran liberados varios pescadores que incursionaron ilegalmente en aguas territoriales dominicanas.
En dos semanas consecutivas ha sido suspendido el mercado binacional por la agresividad de decenas de haitianos incómodos porque se les impidió entrar, junto a los legalizados que tienen permiso para accesar a territorio dominicano y que visitaron a sus familiares en ocasión de las pasadas festividades navideñas.
Incluso, el ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, anunció la suspensión del diálogo que mantiene el gobierno con Haití por considerar que no existen condiciones para el mismo, debido al clima de intranquilidad y a las protestas anunciadas contra el gobierno de Martelly por grupos opositores, las que se llevan a cabo violentamente.
Ya se ha hecho costumbre el secuestro, por vándalos, de camiones y choferes que se dedican al transporte de mercancías entre las dos naciones aduciendo cualquier pretexto y poniendo en peligro las vidas del personal de esos vehículos, los bienes transportados y los propios medios de transporte que han resultado dañados.
El problema haitiano es muy delicado por todas las implicaciones que conlleva y por ello, el gobierno lo ha tratado como tal, pero entiendo que, al margen de las tradicionales vocinglerías patrioteras, es tiempo de que el Estado asuma una actitud más responsable frente a los desafueros de los haitianos.
Nuestra probada solidaridad y deseo de buenas relaciones, no pueden impedirnos defender firme y enérgicamente a nuestros ciudadanos y la soberanía nacional, aquí y en las representaciones diplomáticas dominicanas en el vecino país por lo que ya se iniciaron reuniones en la frontera presididas por el canciller Andrés Navarro y el ministro de Defensa, teniente coronel Máximo Wiliam Muñoz Delgado.
Existen razones válidas para preocuparse ante los últimos hechos que involucran a nacionales de la vecina isla que persisten en mantener una actitud agresiva frente a los dominicanos, llegando al extremo de acosar y sitiar al personal del consulado de Anse-A-Pitre, hasta tanto fueran liberados varios pescadores que incursionaron ilegalmente en aguas territoriales dominicanas.
En dos semanas consecutivas ha sido suspendido el mercado binacional por la agresividad de decenas de haitianos incómodos porque se les impidió entrar, junto a los legalizados que tienen permiso para accesar a territorio dominicano y que visitaron a sus familiares en ocasión de las pasadas festividades navideñas.
Incluso, el ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, anunció la suspensión del diálogo que mantiene el gobierno con Haití por considerar que no existen condiciones para el mismo, debido al clima de intranquilidad y a las protestas anunciadas contra el gobierno de Martelly por grupos opositores, las que se llevan a cabo violentamente.
Ya se ha hecho costumbre el secuestro, por vándalos, de camiones y choferes que se dedican al transporte de mercancías entre las dos naciones aduciendo cualquier pretexto y poniendo en peligro las vidas del personal de esos vehículos, los bienes transportados y los propios medios de transporte que han resultado dañados.
El problema haitiano es muy delicado por todas las implicaciones que conlleva y por ello, el gobierno lo ha tratado como tal, pero entiendo que, al margen de las tradicionales vocinglerías patrioteras, es tiempo de que el Estado asuma una actitud más responsable frente a los desafueros de los haitianos.
Nuestra probada solidaridad y deseo de buenas relaciones, no pueden impedirnos defender firme y enérgicamente a nuestros ciudadanos y la soberanía nacional, aquí y en las representaciones diplomáticas dominicanas en el vecino país por lo que ya se iniciaron reuniones en la frontera presididas por el canciller Andrés Navarro y el ministro de Defensa, teniente coronel Máximo Wiliam Muñoz Delgado.
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Muy de acuerdo contigo, Fernando. Como país soberano tenemos el derecho y la obligación de proteger nuestro territorio. El problema de la inmigración ilegal haitiana ha sido descuidada por tanto tiempo que se ha convertido en un tremendo tollo del que no se podrá salir con improvisaciones y soluciones Mickey Mouse como el muro que proponen los que buscan brillar con el problema. Es un problema serio, que requiere propuestas serias ya; el tiempo solo lo hará más complejo. Lo primero que hay que hacer es imponer penas máximas a los traficantes de haitianos y multas millonarias a las empresas que los emplean.
ResponderBorrarTanto el gobierno de Haití como el dominicano son responsables del desbarajuste y no están enfrentando la situación de manera seria.
Isaías
Abordar tan preocupante tema, no es tan fácil y simple.Sus raices ya son profundas, y están muy bien ancladas. A ese tema hay que abordarlo con mucha cautela y gran inteligencia, pero con mucha responsabilidad,determinación y corage.
ResponderBorrarAntonio Mateo Reyes.
He querido volver a externar algunas consideraciones sobre el preocupante tema haitiano, detallado en el artículo de nuestro hermano Fernando Rodríguez. El hecho histórico de que los ciudadanos haitianos durante décadas se hayan estado desplazando de una manera gradual y sistematica hacia el territorio dominicano, ha permitido que nuestra sociedad no se haya podido percatar en tiempo y espacio de la gravedad de esas migraciones que, hoy tantos problemas están ocasionando al pueblo dominicano.Agregado a esas circunstacias está la indiferencia mostrada por las autoridades dominicanas en la aplicacion correcta de nuestras leyes migratorias.Creo que todavía podemos hacer
ResponderBorrarvaler lo que por derecho nos pertenece. Presidente en sus manos está la obligación de hacer cumplir nuestras leyes migratorias.De lo contrario otra será la historia.
Antonio Mateo Reyes..