sábado, 6 de diciembre de 2014
TEMA DEL ABORTO ENFRENTA ESTADO A RELIGIONES
Por Fernando Rodríguez Céspedes
Como era previsible, las iglesias católica y protestantes enfrentan abiertamente al Poder Ejecutivo por su decisión de observar los artículos del reformado Código Penal alusivos al aborto y las circunstancias en que debe permitirse sin que constituya una violación a la Constitución y las leyes.
Con esta observación, el presidente Danilo Medina, busca que el Congreso asuma su responsabilidad de establecer claramente, las excepciones en la aplicación de una legislación que involucra la vida y dignidad de cualquier mujer que corra peligro de muerte o que haya sido víctima de violación o incesto.
Prevé también el aborto cuando el feto padezca "malformaciones incompatibles con la vida" y la dignidad humana, agregaría yo, atendiendo el artículo 38 de nuestra constitución que hace al Gobierno garante de la dignidad de sus ciudadanos, y todos conocemos las penurias y desamparo de los pobres con malformaciones congénitas.
El tema es delicado y por ser un asunto de Estado, deben dejarse de lado las consideraciones religiosas y pensar en la situación que se crea a una familia que es privada de la madre para salvar a una criatura que, al igual que los otros hijos, quedará huérfana, si se salva, en el acto.
Hay que ponderar las consecuencias de un embarazo producto de una violación o incesto. Obligar, por ley, a una mujer a cargar de por vida con el fruto de un acto de agresión de esa naturaleza, es una irresponsabilidad sobre todo en una sociedad en la que ni las iglesias ni el Estado garantizan asistencia ni protección a las víctimas.
Confiamos en que, al final, la razón se imponga al dogmatismo religioso porque en un estado laico las normas y creencias religiosas deben manejarse de acuerdo al libre albedrío y conciencia de cada quien, pero nunca imponerse en base a leyes producto de presiones.
Como era previsible, las iglesias católica y protestantes enfrentan abiertamente al Poder Ejecutivo por su decisión de observar los artículos del reformado Código Penal alusivos al aborto y las circunstancias en que debe permitirse sin que constituya una violación a la Constitución y las leyes.
Con esta observación, el presidente Danilo Medina, busca que el Congreso asuma su responsabilidad de establecer claramente, las excepciones en la aplicación de una legislación que involucra la vida y dignidad de cualquier mujer que corra peligro de muerte o que haya sido víctima de violación o incesto.
Prevé también el aborto cuando el feto padezca "malformaciones incompatibles con la vida" y la dignidad humana, agregaría yo, atendiendo el artículo 38 de nuestra constitución que hace al Gobierno garante de la dignidad de sus ciudadanos, y todos conocemos las penurias y desamparo de los pobres con malformaciones congénitas.
El tema es delicado y por ser un asunto de Estado, deben dejarse de lado las consideraciones religiosas y pensar en la situación que se crea a una familia que es privada de la madre para salvar a una criatura que, al igual que los otros hijos, quedará huérfana, si se salva, en el acto.
Hay que ponderar las consecuencias de un embarazo producto de una violación o incesto. Obligar, por ley, a una mujer a cargar de por vida con el fruto de un acto de agresión de esa naturaleza, es una irresponsabilidad sobre todo en una sociedad en la que ni las iglesias ni el Estado garantizan asistencia ni protección a las víctimas.
Confiamos en que, al final, la razón se imponga al dogmatismo religioso porque en un estado laico las normas y creencias religiosas deben manejarse de acuerdo al libre albedrío y conciencia de cada quien, pero nunca imponerse en base a leyes producto de presiones.
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Fernan,
ResponderBorrarEs un tema delicado, como dices, pero uno en que la iglesia no debe meter sus narices, pues al fin y al cabo, la decisión final a cuestiones tan delicadas e íntimas debe recaer sobre la mujer, sus familiares y el médico. La iglesia, en su afán de demonizar y querer imponer sus creencias a la población habla como si de pronto la gente fuera a practicar el aborto como deporte; por gusto. No se dan por enterados que se trata de una opción que se debe dejar abierta para casos extremos y circunstancias especiales, cuando se hayan agotado todas las demás opciones. Yo y mi familia no creemos en el aborto per se, pero reconocemos y respetamos el derecho de cada quien a decidir lo que debe hacer con un embarazo traumatizante.
Coño, si se deja a las iglesias, llamarán genocidio a la muerte de los espermatozoides que mueren en cada eyaculación.
La medicina está demasiado adelantada para dejar morir a madres que se podrían salvar de una preñez peligrosa. Es hora de que dejemos de seguir creyendo en supersticiones arcaicas, sobre todo de las imposiciones de una iglesia que ha causado tanto daño y no tiene moral para impartir enseñanzas.
Isaías
El estado dominicano es laico y por lo tanto no debe ser manipulado por ninguna creencia relijiosa., no importa que sea cristianos, mahometanos, budistas .La salud de nuestras mujeres con menos oportunidades economicas esta peligrada cuando por creencias de un grupo imponemos, reglamentamos lo que se puede o no hacer con un enbarazo que podria acabar con la vida o salud de una madre.Cuando los cardenales y pastores puedan quedar enbarasados entonces pondremos leyes restrictivas.
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