Bardo, Poeta y Cantor de su Mao
Por Evelio Martínez
Lea la primera parte, haciendo clic AQUÍ
Víctor Melitón cultivó diferentes géneros de la literatura, un rasgo que le distingue. No empleó las palabras con un fin ególatra en sí; no llenó sus obras de palabras vacías. Sus textos, elaborados en un estilo culto, sin rebuscamiento exagerado, son un caudal de experiencias e informaciones extraídas de la vida o de los diversos contextos culturales en que vivió.
Víctor buscaba comunicar no sólo palabras y significados sino, sobre todo, acontecimientos. Hay mucha libertad en la escritura política de Víctor Melitón, sobre todo referencial, es decir, en función de las situaciones del momento. Así le canta a su primo Piculín, le llama, "Niño-hombre para toda causa justa".
Desde Río Piedras, Puerto Rico, un 24 de Diciembre de 1963, dice:--"Querido guerrillero Piculín: Tú sabías de la verdad/y no querías saber de las palabras falsas/Que pierden a la patria y a los hombres/Tú querías saber del fusil vindicador. Naciste así predestinado luchador/Para muchas jornadas".
En un nuevo escenario y como cantor de tronos y reinas, en el año 1982 le canta a Cesarina Primera, reina del primer centenario de Mao: --"Cientos de miles de años/De luz y Hondas esencias/Esperaron por ti tras largas mutaciones/Silenciando milagros y ocultando presencias/Altísima y castas como las ilusiones/Redomadas a fuego ¡para hacerlas más puras!
En su Mao Entre Ríos, opúsculo que escribió en Noviembre del 1982, como una ofrenda a los bardos Rafael Rodríguez Portes (su padre), y a Georgilio Mella Chavier, y el que me cupo el honor de prologar, recoge un poema del 1951: "Mayo con penas y esperanzas/La verdad hecha sombra con la mancha de sangre/Que enlutaba la blanca conciencia de mi lar/Será verdad ,quien sabe cuándo...".
Víctor Melitón habló siempre en un lenguaje de la tierra, del ideal tomado del brazo de luceros y vientos. De joven así lo afirma, describiéndose a sí mismo, describiendo su nueva situación, la de ser el portador de la palabra libre conquistada en el nuevo contexto; así, escribe en 1952 en "El Ideal": --"El ideal es la fuerza que elaboró la vida/Por él existe el mundo/En el ideal está Dios/Vibrando en brazo del viento/Y a través de la sangre/La carne es viento y polvo".
A su Mao querido en ese mismo poema le afirma: "Mao es grande ideal/que jamás morirá/Porque ya tiene historia/Que vivirá por siempre".
En su tríptico al Río Mao hay un bello poema (un fragmento), que quiero compartir con los lectores de MEEC: "Sueño en el río/Que es fragmento de un sueño/Eterno y amplio en que estás tú/Símbolo e ideal en mi conciencia/Tú/Dormida transparencia/Que fluye como agua/Cristalina, sublimada/Para amarnos en él/Toda la eternidad".
¡Loor insigne poeta y académico! ¡Salve hijo de Mao y de Juan de Jesús Reyes!
Nuestra familia se siente orgullosa y prestigiada, al contar, entre sus miembros, con el distinguido y muy apreciado primo Don Víctor Melitón Rodríguez, académico brillante, acucioso investigador, profesor de grandes méritos e insigne poeta. ¡¡Salve... Bardo, Poeta y Cantor de nuestro querido Mao. Nos inclinamos reverentemente
ResponderBorrara sus pies!!
Gracias de corazón Comandante Evelio Martínez: ¡Honrar... Honra!
Con cariño y afecto, Diómedes Rodríguez Martínez y Familia
Comandante ; gracias por mostrarme parte de las buenas cosas que tiene Mao desconocidas parcialmente . Gran importancia tendría seguir rebuscando valiosos tesoros hundidos en el mar de la ignorancia .
ResponderBorrarManito
Querido Evelio: Víctor Melitón era asiduo visitante de mi casa, parece ser que le gustaba conversar con mamá, porque estando ella en cama no dejaba de visitarla cuando venía a Mao. En una de esas visitas, me llamó para entregarme un papel que contenía un poema que había compuesto para mi en ese mismo momento. Yo tendría como unos trece o catorce años, y recuerdo que era muy hermoso y en él me comparaba con las estrellas. Aunque me sentí orgullosa de ser inspiradora de semejante belleza, no recuerdo qué pasó después...pero ¡qué pena que no lo conservara con el respeto que merecía!
ResponderBorrarLoor a ese hombre luz.
Lavinia.