viernes, 31 de octubre de 2014

EL PRECIO DE LA SOLIDARIDAD

Por Fernando Ferreira Azcona

Siempre he sido de opinión que las enfermedades catastróficas, y más específicamente el cáncer, terminan con la vida del paciente, destruyen la estabilidad emocional de la familia, y en muchos casos dejan maltrecha la situación socio-económica de ésta última. Con este convencimiento, hace muchos años adquirí una póliza internacional de seguro de salud para protegerme y proteger a mí esposa Nana, contra esta clase de enfermedades.

Reciéntemente estaba leyendo la Palabra Diaria cuando mi teléfono celular timbró. Respondí la llamada, y que grata sorpresa. Era mi gran amigo Pedro Jaime Tió, con quien no conversaba hacía varios meses. Sin muchos rodeos, Pedro Jaime me planteó la conveniencia de que yo abriera una cuenta bancaria, a nombre mío, obviamente, en la cual, amigos y relacionados de otro amigo muy querido afectado de una enfermedad terminal pudiesen depositar sus colaboraciones voluntarias, con el propósito de coadyuvar a solventar los altísimos costos del cáncer que padecía.

Consciente de la maledicencia que caracteriza al ser humano, le respondí a Pedro Jaime que lo pensaría detenidamente, y que le dejaría saber mi decisión.

Al terminar la conversación telefónica, continué leyendo la Palabra Diaria, y… ¡cuán grandes son los designios del Señor! Al terminar la lectura, la reflexión del día era “buscar a alguien que estuviese sufriendo intensamente, e ir en su auxilio”. Inmediatamente me paré de mi escritorio, tomé varios miles de pesos de mi peculio y me dirigí a la sucursal bancaria más cercana a abrir una cuenta de ahorros con libreta, con el propósito de satisfacer lo que se me había sugerido.

Posteriormente, llamé por teléfono al ideólogo de esta acción y le conté lo narrado en el párrafo anterior. Asimismo, envié un correo electrónico al círculo de amigos más íntimos del amigo enfermo, informándoles de la apertura y todos los datos relativos a la cuenta. Quiero enfatizar, que igual que en estas cuartillas, en ningún momento se mencionó el nombre de beneficiario final.

Un par de días más tarde comenzaron a llegar las llamadas telefónicas a la familia del amigo enfermo, específicamente desde Miami, New York y Mao, informándole y advirtiéndole, que “un hijo de Vitalino Ferreira había abierto una cuenta bancaria, supuestamente con los fines antes señalados y que ellos debían estar atentos al destino final de los fondos recaudados”.

Incómodo, llamé a Pedro Jaime, quien con su paciencia habitual sonrió y me dijo: “Fernan, ese es el precio de la solidaridad”. De ahí, el título de este artículo…

He meditado mucho sobre la conveniencia o no de escribir sobre este tema. ¡Mis detractores podrían ofenderse! Sin embargo, a mi me gustan mucho los refranes. Creo que no sólo encarnan la sabiduría del pueblo, sino que representan además la forma en que los menos ilustrados llevan “las estadísticas”. Y uno de estos dice que “el que calla otorga”.

Entonces, no puedo quedarme callado ante la duda expresa sobre la honestidad de un miembro de la familia Ferreira Azcona. Mucho menos puedo admitir que se dude de mi honestidad. En más de cuarenta y dos años de ejercicio profesional he manejado miles de millones de pesos ajenos y no se me “ha pegado” un solo centavo. No me cabe la menor duda de que la trayectoria ciudadana y profesional de nuestra familia es una demostración fehaciente de que “se puede cruzar el pantano, sin enlodarse”.

Entonces, ¿Qué puede llevar a gente que nos conoce a pensar que vamos a desviar esa conducta por dos o tres miles de pesos? ¿Será mezquindad o que “el ladrón juzga por su condición”? Muchos aseveran que cada hombre tiene su precio. De ser así, no creo que el mío sea tan bajito.

A estos “amigos”, les puedo asegurar que el más mínimo ingreso a esa cuenta, así como cada egreso de la misma está debidamente documentado. Si me demuestran con documentos fehacientes que aportaron un solo centavo a la misma, les enviaré la debida rendición de cuentas, como lo haré con aquellos que sí aportaron.

A pesar de lo expresado por Publio Terencio: “soy hombre, nada humano me es ajeno”, y por Lord Byron: “mientras más conozco al hombre, más amo a mi perro” …¡Dios Mío, cuánta mezquindad y cuánta maledicencia! Oh Floppy* ¡Cuanta falta nos haces!


*Floppy era la perrita puddle de la familia Ferreira Núñez, sobre la cual escribí un artículo recientemente.

10 comentarios:

  1. Tituá... una galleta sin manos. Bien por ti, Mano. Así se les contesta a los Kagadus Ignoramus

    Isaías

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  2. Una vez escribí sobre mamá que "... no le importó herirse con las espinas con tal de recoger las rosas que ofreció a la humanidad", te regalo también a ti esta frase, estas recogiendo rosas y es inevitable que las espinas te hieran, pero eres más grande que la duda y más noble que cualquier pensamiento estúpido. Recuerda que cada quien da lo que tiene, y lamentablemente muchos viven de sus carencias.
    Un beso.
    Lavinia.

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  3. Mi hermano blanco hasta Jesús lo crucificaron al final ,así mismo no se deje crucificar ,ni tampoco ponga la otra mejilla ,coja el látigo como ahora y saque del templo de nuestros corazones a los que se atrevieron a pensar que podían dudar ,porque no tienen nada en la mente si es que la tienen .
    Puede haber una conducta igual pero no mejor que la tuya mi hermano .Abrazos .

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  4. Fernan, casi incurro en tu misma situación. Vamos a realizar los próximos días un telemaratón con la finalidad de ir en auxilio del sub_director de nuestra Banda Municipal, quien necesita la aplicación de varias sesiones de quimioterapia, y el costo de la misma ronda por los 4 millones de pesos. Ojalá todo Mao se anime y valla en auxilio de tan noble causa. Después de saber de tu dolor, voy a sugerir a quienes me acompañen en esta altruista tarea abrir una cuenta a nombre de varias personas.

    Antonio Mateo Reyes.

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  5. Fernan,duerme tranquilo, porque en nuestro pueblo todos conocemos de la acrisolada conducta de tus padres y de tus hermanos, y esa es una virtud que todos debemos observar, porque al paso del tiempo eso es lo que vale y perdura. A mi abuelo,don Efraín Reyes, siempre le oí decir la siguiente frase. "El honor vale mas que la vida".

    Antonio Mateo Reyes.

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  6. Fernan,el poeta Parmenio Reyes escribió estos versos para los que han hecho de su cotidiano vivir, una infeliz exitencia.Fundamentada en la mala práctica de matar la sana moral de lo que han hecho el esfuerzo de actuar correctamente en medio de tantos malos ejemplos. Este poema es el reflejo de un taladrante dolor provocado por el hechizo humeante de la brasa perniciosa de una lengua encendida con un abrazador e impiadoso fuego que mata o pretende acabar con una conducta sana.

    Contraste (1)

    Lenguas reñidas con la gran verdad
    Lenguas arpías, viles, gangrenosas,
    Lenguas de sierpes, frías, venenosas,
    Lenguas infiernos de perversidad.

    Lenguas terribles para la maldad.
    Lenguas que tiznan glorias, envidiosas
    Lenguas erizos, fieras, espinosas
    Lenguas que matan, sin tener piedad.

    Lenguas que vierten odios y rencores,
    Lenguas de luengos tétricos presagios,
    Lenguas infames, causas de dolores.

    Lenguas que sólo saben dar agravios,
    Lenguas sin alma, lenguas sin amores,
    Lenguas que saben provocar naufragios.

    Contraste (2)

    Lenguas nacidas para la belleza,
    Lenguas que sueñan célicos amores,
    Lenguas cristianas siempre de colores,
    Lenguas que brindan místicas ternezas,

    Lenguas virtuosas tras largas proezas,
    Lenguas resumen de grandes valores,
    Lenguas piadosas sobre los dolores,
    Lenguas de santos llenas de purezas.

    Lenguas con altas fraternas urgencias,
    Lenguas humanas fuente de poesía,
    Lenguas veneros de nobles creencias.

    Lenguas auroras de glorioso día,
    Lenguas que saben elevar conciencias,
    Lenguas que tienen a Dios como guía.

    Parmenio Reyes

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  7. Muy apreciado Fernan, quiero reafirmar algo que tienes que saber; tantos años de honorabilidad, seriedad y solidaridad no se puede tapar con un dedo ni con dudas y comentarios mezquinos, sino que como dices “ladrón juzga por su condición” y su falta de solidaridad.

    Que para nada te frenen los malagradecidos, sino que te motive tus buenos sentimientos a seguir haciendo la buena obra, acumulando tesoros en los cielos donde nada se corrompe.
    Recuerda que nada que pase al humano no lo ha pasado ya nuestro Dios y Señor:
    De tal manera amo Dios al mundo que envió a su único hijo para que todo él quien en crea no se pierda mas tenga vida eternal.

    Primero: Dios dando
    Segundo: Jesús dándose
    Tercero: El hombre echando ese sacrificio al desperdicio y al olvido, más aun, ni los de su tiempo lo aceptaron sino que lo crucificaron. Con todo y eso no se quita el valor y precio de la acción de Dios por nosotros.

    Dios te bendiga, y bendiga toda tu generación, arriba corazones!

    Susana Jáquez

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  8. No, no creo que Fernan dignificara con su escrito al cobarde que se escudó en las sombras para verter su veneno. Hay muchos sinvergüenzas que solo saben murmurar, que ven teorías conspirativas hasta en la sopa, que son una desgracia para la condición humana, y si bien es verdad que la mayoría de las veces hay que ignorarlos y continuar la obra a pesar de ellos, no es menos cierto que a veces hay que enfrentarlos, pues los sinvergüenzas se imponen porque los sensatos y correctos callan.

    Isaías

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  9. Satanas se vale de personas como esas para que los humanos nobles, generosos y buenos como tu no sigan haciendo el bien. Una muestra de tu intachable conducta es la que Pedro Jaime, mi primo, te eligiera para que administrara esa cuenta, pues a todos nos consta lo que son todos ustedes, incluyendo a tu valioso padre don Vitalino al que agradecemos y bendecimos. Continua tu buena obra al igual que tu hermano Norman, tu padre y toda tu familia, pues como dice Susana, acumularas riquesas en el cielo y agradara a tu Padre Celestial. No te dejes extraviar, que nada te aparte de ese hermoso camino.

    Danaides Brito Reyes

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  10. Queridos(as) Amigos(as):

    Gracias por sus comentarios de respaldo a lo que ha sido nuestra trayectoria familiar. Pueden estar seguros que continuaremos tratando de ayudar y servir a quienes más lo necesiten, sin importar los comentarios mal intencionados.

    El servicio voluntario y honorífico, en beneficio de los menos afortunados es "una droga" más adictiva que la cocaina y la heroina juntas, pero contrario a estas últimas, que destruyen el organismo humano, dar de sí, hasta que duela, como dijo Teresa de Calcuta, alimenta el alma, le da sentido y plenitud a la vida. Cuando sirves a una causa justa, la satisfacción interior es comparable a "tocar los dinteles de la Gloria".

    Así, que continuaremos ofreciendo nuestro tiempo y servicios honoríficos a instituciones sin fines de lucro e igualmente, realizando modestos aportes financieros a causas dignas.

    Estoy convencido que existe mucho más gente buena, que malvados. Lo único que estos últimos hacen más ruido venenoso.

    En nuestra familia, no tenemos "techos de cristal". De tal manera, que podemos tirar piedras hacia arriba, sin temor a que las mismas, al caer, nos hagan daño...

    Con mucho afecto,

    Fernan Ferreira.

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