martes, 27 de marzo de 2012
APUNTES BIOGRÁFICOS DE RAFAEL EMILIO ARTÉ CRUZ
Por Rafael Darío Herrera
El autor es historiador y educador. Miembro correspondiente de la Academia Dominicana de la Historia.
Nota de la redacción: Estos apuntes biográficos de dos talentosos músicos, padre e hijo, constan de dos partes. La primera parte nos permite echar un breve vistazo a los puntos relevantes de la vida de RAFAEL ILDEFONSO ARTÉ SAGUÉ, de nacionalidad española, una leyenda de la música en Puerto Plata y Santiago; y la segunda nos da algunos detalles relevantes de la vida de su súper talentoso hijo, RAFAEL EMILIO ARTÉ CRUZ, este último una leyenda en el pueblo de Mao por todas sus contribuciones a la música de la región.
UN PROGENITOR ILUSTRE - RAFAEL ILDEFONSO ARTÉ SAGUÉ
Rafael Emilio Arté Cruz era hijo de un extraordinario músico español, Rafael Ildefonso Arté Sagué, uno de los principales propulsores del desarrollo musical de Santiago de los Caballeros, quien arribó al país procedente de Puerto Rico en el período de la anexión a España pero decidió permanecer aquí luego de la desocupación del territorio nacional por parte de las tropas militares españolas en 1865. Inicialmente residió en Puerto Plata donde dirigió la escuela y la banda de música y posteriormente se estableció en Santiago, donde compartió la enseñanza de la música con sus labores como empleado de la casa comercial del también catalán español José Batlle Filbá.
Arté Sagué nació en Figueras, Gerona, España, el 4 de septiembre de 1843, hijo de Pablo Arté y María Gibert Sagué, datos estos que figuran en su tumba del cementerio municipal de Santiago, como lo consigna el historiador santiaguero Edwin Espinal en su Historia social de Santiago, quien también aporta el dato de que Arté tenía dos hermanos: Dolores, matrimoniada con Luis Porret y Juan María quien residía en Naguabo, Puerto Rico.
En 1872 Arté Sagué fundó en Santiago la banda de música del Batallón del Yaque que se convirtió en la principal organización musical de toda la región del Cibao así como una escuela de música que inició con 21 alumnos. Para pagar los instrumentos que solicitó en el exterior (París y Milán), por mediación de Furcy Fondeur, Arté se vio precisado a hipotecar su casa. El concierto inaugural de la banda aconteció el 16 de agosto de 1874, y de acuerdo con una reseña publicada en el periódico El Día (1º de noviembre de 1874), entre las piezas musicales interpretadas se encontraban Roberto, el diablo, La Traviata, etc.
Entre los discípulos de Arté que lograron descollar se encuentran José Ovidio García, su más aventajado discípulo, fundador del “Centro lírico cultural Rafael I. Arté”, principal centro de educación musical de toda la región Norte del país, donde se formaron músicos de la talla de Juan Francisco García, autor de la primera sinfonía escrita en el país, José O. García Vila, considerado en su época como el mejor violinista de atril, Julio Alberto Hernández, etc. Y Ramón Emilio Peralta quien también se dedicó a la enseñanza de la música y en 1909 dirigía la Banda de música fundada por Arté, que en ese momento se la consideraba un modelo de organización. La muerte de Arté, el 7 de marzo de 1877, a los 34 años edad, afectó sensiblemente la sociedad santiaguera así como la propia existencia de la banda que cayó en un estado de anarquía e indisciplina, lo que motivó duras críticas de los periódicos locales.
El fervor hacia el maestro Arté era de tal dimensión que todavía en 1909, a los 32 años del fallecimiento de Arté, toda la sociedad de Santiago se movilizaba para homenajear al ilustrado maestro de la música. Esto incluía el gobernador, sus discípulos, la banda de música, el Club Santiago, Amantes de la Luz, Alianza Cibaeña, la guardia republicana y cientos de personas, quienes al ritmo de la conocida marcha fúnebre “Memento” de Signard, que tocaba la banda de música dirigida por Rafael Marcelino, marchaban hacia la tumba del notable músico. (El Diario, 20 de marzo de 1909).
EL NACIMIENTO DE RAFAEL EMILIO - DON EMILIO ARTÉ
En Santiago, Arté Sagué se matrimonió con Petronila Cruz (doña Petra) con quien procreó a Rafael Emilio Arté Cruz (Santiago, 5 de abril de 1873 y Mao, 2 de febrero de 1970), quien no pudo heredar el capital cultural de su padre en materia de música por la prematura muerte de este. Rafael Emilio pasó a vivir a Puerto Plata donde se formó verdaderamente como músico pues se integró a la banda de música militar de aquella ciudad, dirigida por competentes músicos extranjeros, quienes además impartían docencia en la escuela de música anexa a la banda.
De acuerdo con Rufino Martínez, historiador y biógrafo puertoplateño, en Rafael Emilio “tuvo el pueblo dominicano un vigoroso temperamento musical e inspirado en el componer, y más que eso, un notable saxofonista y un extraordinario ejecutante de la guitarra sin parangón en la República. Se le tuvo por virtuoso de dicho instrumento”. Sabemos que don Emilio también tocaba otros instrumentos como el piano, órgano, violín, bandoneón, etc. Sus habilidades musicales también las exhibió en varios países, como en Cuba, donde acompañó a la orquesta sinfónica nacional de ese país como solista de guitarra clásica.
Antes de llegar a Mao, Rafael Emilio residió en la ciudad marítima de Samaná donde ejercía su oficio de músico. Al parecer Arté cometió allí alguna infracción, pues el periódico El Diario de Santiago, del 14 de octubre de 1905, incluyó la siguiente nota: “Arté. Por tren de hoy fue traído de Puerto Plata, en calidad de preso, el señor Emilio Arté, quien fue sentenciado por el Juzgado de 1ª Instancia de Samaná a dos años de prisión”.
Arté llegó a Mao contratado por Amado Franco Bidó para formar la banda de música local, la cual dirigió durante cincuenta largos años. Inicialmente se albergó en la casa de la familia Madera hasta que logró ubicar una residencia definitiva y se hallaba casado con Ercilia Ventura (Sila). Al igual que su progenitor se dedicó a enseñar sus conocimientos musicales a una amplia cohorte de maeños entre los que se encontraban su propia hija, Antonia Magdalena Arté (Tontón), Luis Alberti (cuyo padre, el Dr. Narciso Alberty Bosch, ejerció la medicina durante varios años en Mao), Radhamés Reyes Alfau, Daniel Colón (Lucero), Rafael Rodríguez Colón, (Fello), Milito Arté, entre otros.
Todavía algunos maeños recuerdan aspectos de la vida cotidiana de don Emilio, especialmente se recuerda su figura en el lomo de un caballo cuando se desplazaba por las principales iglesias contiguas a la ciudad de Mao (El Cercado, Martínez, Entrada de Mao, etc.) para acompañar las misas con su órgano. Don Emilio participaba en todas las actividades culturales que se realizaban en la ciudad de Mao en su época y a su vivienda acudían los hijos/as de las principales familias en busca de conocimientos musicales.
Don Emilio vino a Mao acompañado de su madre doña Petra (mejor conocida como doña Sila) y su hija Ana Dolores que había procreado con un señor de apellido Borrell, oriundo de Mataró (España) pero a quien don Emilio reconoció con su apellido. Ana Dolores, mejor conocida como la Niña Arté, procreó a su vez varios hijos con el ciudadano español Ricardo Canalda: Digna y su mellizo Rafael, Emilio (Milito) y Francisca Arté que se casó con el Dr. Rafael Rodríguez Colón. Mientras Digna tuvo como único hijo a Francisco Arté (Brichi) que sí heredó el capital musical de sus ancestros, especialmente de doña Tontón Arté y enriquece con su música las ceremonias religiosas de nuestra catedral Santa Cruz. Otros descendientes de Ricardo Canalda fueron: Kenida, Elsa Juana, Ricardo.
RELACIONADO: DON EMILIO ARTÉ: GLORIA MUSICAL NUESTRA. Por Juan Colón.
El autor es historiador y educador. Miembro correspondiente de la Academia Dominicana de la Historia.
Nota de la redacción: Estos apuntes biográficos de dos talentosos músicos, padre e hijo, constan de dos partes. La primera parte nos permite echar un breve vistazo a los puntos relevantes de la vida de RAFAEL ILDEFONSO ARTÉ SAGUÉ, de nacionalidad española, una leyenda de la música en Puerto Plata y Santiago; y la segunda nos da algunos detalles relevantes de la vida de su súper talentoso hijo, RAFAEL EMILIO ARTÉ CRUZ, este último una leyenda en el pueblo de Mao por todas sus contribuciones a la música de la región.
UN PROGENITOR ILUSTRE - RAFAEL ILDEFONSO ARTÉ SAGUÉ
Rafael Emilio Arté Cruz era hijo de un extraordinario músico español, Rafael Ildefonso Arté Sagué, uno de los principales propulsores del desarrollo musical de Santiago de los Caballeros, quien arribó al país procedente de Puerto Rico en el período de la anexión a España pero decidió permanecer aquí luego de la desocupación del territorio nacional por parte de las tropas militares españolas en 1865. Inicialmente residió en Puerto Plata donde dirigió la escuela y la banda de música y posteriormente se estableció en Santiago, donde compartió la enseñanza de la música con sus labores como empleado de la casa comercial del también catalán español José Batlle Filbá.
Arté Sagué nació en Figueras, Gerona, España, el 4 de septiembre de 1843, hijo de Pablo Arté y María Gibert Sagué, datos estos que figuran en su tumba del cementerio municipal de Santiago, como lo consigna el historiador santiaguero Edwin Espinal en su Historia social de Santiago, quien también aporta el dato de que Arté tenía dos hermanos: Dolores, matrimoniada con Luis Porret y Juan María quien residía en Naguabo, Puerto Rico.
En 1872 Arté Sagué fundó en Santiago la banda de música del Batallón del Yaque que se convirtió en la principal organización musical de toda la región del Cibao así como una escuela de música que inició con 21 alumnos. Para pagar los instrumentos que solicitó en el exterior (París y Milán), por mediación de Furcy Fondeur, Arté se vio precisado a hipotecar su casa. El concierto inaugural de la banda aconteció el 16 de agosto de 1874, y de acuerdo con una reseña publicada en el periódico El Día (1º de noviembre de 1874), entre las piezas musicales interpretadas se encontraban Roberto, el diablo, La Traviata, etc.
Entre los discípulos de Arté que lograron descollar se encuentran José Ovidio García, su más aventajado discípulo, fundador del “Centro lírico cultural Rafael I. Arté”, principal centro de educación musical de toda la región Norte del país, donde se formaron músicos de la talla de Juan Francisco García, autor de la primera sinfonía escrita en el país, José O. García Vila, considerado en su época como el mejor violinista de atril, Julio Alberto Hernández, etc. Y Ramón Emilio Peralta quien también se dedicó a la enseñanza de la música y en 1909 dirigía la Banda de música fundada por Arté, que en ese momento se la consideraba un modelo de organización. La muerte de Arté, el 7 de marzo de 1877, a los 34 años edad, afectó sensiblemente la sociedad santiaguera así como la propia existencia de la banda que cayó en un estado de anarquía e indisciplina, lo que motivó duras críticas de los periódicos locales.
El fervor hacia el maestro Arté era de tal dimensión que todavía en 1909, a los 32 años del fallecimiento de Arté, toda la sociedad de Santiago se movilizaba para homenajear al ilustrado maestro de la música. Esto incluía el gobernador, sus discípulos, la banda de música, el Club Santiago, Amantes de la Luz, Alianza Cibaeña, la guardia republicana y cientos de personas, quienes al ritmo de la conocida marcha fúnebre “Memento” de Signard, que tocaba la banda de música dirigida por Rafael Marcelino, marchaban hacia la tumba del notable músico. (El Diario, 20 de marzo de 1909).
EL NACIMIENTO DE RAFAEL EMILIO - DON EMILIO ARTÉ
En Santiago, Arté Sagué se matrimonió con Petronila Cruz (doña Petra) con quien procreó a Rafael Emilio Arté Cruz (Santiago, 5 de abril de 1873 y Mao, 2 de febrero de 1970), quien no pudo heredar el capital cultural de su padre en materia de música por la prematura muerte de este. Rafael Emilio pasó a vivir a Puerto Plata donde se formó verdaderamente como músico pues se integró a la banda de música militar de aquella ciudad, dirigida por competentes músicos extranjeros, quienes además impartían docencia en la escuela de música anexa a la banda.
De acuerdo con Rufino Martínez, historiador y biógrafo puertoplateño, en Rafael Emilio “tuvo el pueblo dominicano un vigoroso temperamento musical e inspirado en el componer, y más que eso, un notable saxofonista y un extraordinario ejecutante de la guitarra sin parangón en la República. Se le tuvo por virtuoso de dicho instrumento”. Sabemos que don Emilio también tocaba otros instrumentos como el piano, órgano, violín, bandoneón, etc. Sus habilidades musicales también las exhibió en varios países, como en Cuba, donde acompañó a la orquesta sinfónica nacional de ese país como solista de guitarra clásica.
Antes de llegar a Mao, Rafael Emilio residió en la ciudad marítima de Samaná donde ejercía su oficio de músico. Al parecer Arté cometió allí alguna infracción, pues el periódico El Diario de Santiago, del 14 de octubre de 1905, incluyó la siguiente nota: “Arté. Por tren de hoy fue traído de Puerto Plata, en calidad de preso, el señor Emilio Arté, quien fue sentenciado por el Juzgado de 1ª Instancia de Samaná a dos años de prisión”.
Arté llegó a Mao contratado por Amado Franco Bidó para formar la banda de música local, la cual dirigió durante cincuenta largos años. Inicialmente se albergó en la casa de la familia Madera hasta que logró ubicar una residencia definitiva y se hallaba casado con Ercilia Ventura (Sila). Al igual que su progenitor se dedicó a enseñar sus conocimientos musicales a una amplia cohorte de maeños entre los que se encontraban su propia hija, Antonia Magdalena Arté (Tontón), Luis Alberti (cuyo padre, el Dr. Narciso Alberty Bosch, ejerció la medicina durante varios años en Mao), Radhamés Reyes Alfau, Daniel Colón (Lucero), Rafael Rodríguez Colón, (Fello), Milito Arté, entre otros.
Todavía algunos maeños recuerdan aspectos de la vida cotidiana de don Emilio, especialmente se recuerda su figura en el lomo de un caballo cuando se desplazaba por las principales iglesias contiguas a la ciudad de Mao (El Cercado, Martínez, Entrada de Mao, etc.) para acompañar las misas con su órgano. Don Emilio participaba en todas las actividades culturales que se realizaban en la ciudad de Mao en su época y a su vivienda acudían los hijos/as de las principales familias en busca de conocimientos musicales.
Don Emilio vino a Mao acompañado de su madre doña Petra (mejor conocida como doña Sila) y su hija Ana Dolores que había procreado con un señor de apellido Borrell, oriundo de Mataró (España) pero a quien don Emilio reconoció con su apellido. Ana Dolores, mejor conocida como la Niña Arté, procreó a su vez varios hijos con el ciudadano español Ricardo Canalda: Digna y su mellizo Rafael, Emilio (Milito) y Francisca Arté que se casó con el Dr. Rafael Rodríguez Colón. Mientras Digna tuvo como único hijo a Francisco Arté (Brichi) que sí heredó el capital musical de sus ancestros, especialmente de doña Tontón Arté y enriquece con su música las ceremonias religiosas de nuestra catedral Santa Cruz. Otros descendientes de Ricardo Canalda fueron: Kenida, Elsa Juana, Ricardo.
RELACIONADO: DON EMILIO ARTÉ: GLORIA MUSICAL NUESTRA. Por Juan Colón.
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¡¡Excelente Lic. Herrera!!
ResponderBorrarValiosísimo aporte a la cultura maeña; sin desperdicios. Gracias mil a usted y al maestro, mi distinguido primo, Juan Colón. Honrar honra.
Aprovecho para enviar abrazos, afecto y cariño a usted y familia.
Con sentimiento de alta estima,
Diómedes Rodríguez
Rafael Dario: Bravo...Bravo.... merecido reconocimiento para esa gloria no solo nuestra, sino del pais tambien. Un honra, una gloria musical de increibles proporciones.
ResponderBorrarMuy bien Rafael, las palabras para opinar sobran.....como siempre, magistral trabajo.
Abrazos mi querido Rafael,
Sinceramente,
Juan Colon
Gracias Juan por tus palabras. Quise divulgar la biografía del padre de Emilio Arté que fue un venerado músico español que estableció los cimientos para el desarrollo de la música en Santiago y toda la región del Cibao.
ResponderBorrarRafael Darío Herrera